Los entornos cloud computing son herramientas muy potentes para la lucha de enfermedades como el cáncer. A pesar de que este tipo de enfermedades se controlan más que nunca, la verdad es que ponerles freno es complicado. Y aquí es donde la tecnología juega un papel crucial para su prevención y tratamiento en caso de producirse. Porque los avances científicos y tecnológicos ayudarán a que los tratamientos sean cada vez más precisos gracias a la capacidad de análisis de datos en la nube. Ejemplos de ello es el estudio de datos médicos en pacientes como el ADN. Los médicos podrán gracias a estos avances que aceleran los diagnósticos de los pacientes casi recetar tratamientos personalizados gracias a la puesta en común de amplias bases de datos con casos clínicos que se podrán consultar para ver los protocolos a seguir en casos concretos de cada enfermedad.
Los científicos estudian actualmente herramientas tecnológicas que se sirven de entornos cloud que permitan reducir el tiempo que se tarda en encontrar el tratamiento adecuado para un paciente. De esperas de semanas y meses pasaremos a obtener respuesta médica en apenas días o incluso minutos. Estos diagnósticos mejorarán en el futuro porque se volverán inteligentes gracias a la curva de aprendizaje de las personas de la mano de la tecnología y a que la información será más completa y precisa. Los campos que mejorarán con tratamientos y diagnósticos también se ampliará a derrames cerebrales y enfermedades cardíacas, que también ofrecerán tratamientos personalizados gracias a los avances tecnológicos.
A través de la tecnología en la nube, la asistencia sanitaria inteligente llegará a más personas y en más lugares, además de proporcionar el acceso a información vital a una comunidad global de profesionales de la salud, como oncólogos, cardiólogos o genetistas que proporcionarán respuestas más concretas y de éxito sobre las opciones de tratamiento.
